Publicado: 25 de Febrero de 2015

Cuando una persona es diagnosticada con una enfermedad crónica, familiares y amigos pueden sentirse desesperados al pensar que no hay nada que puedan hacer para ayudarles. Sin embargo, según señala la APA (Asociación Americana de Psicología-American Psychological Association) esto no tiene por qué ser así.

En los últimos años, ha surgido un amplio volumen de investigaciones que resaltan laimportancia del rol que juega la familia y los amigos, a la hora de ayudar a los pacientes a sobrellevar una enfermedad crónica. Cuando una persona se encuentra en esta situación, la Asociación subraya la necesidad de hacerle sentir que realmente se preocupan por ella.

A este respecto, es esencial la manera en que las personas interactúan con la persona y con su enfermedad. Como ejemplo, la APA ofrece una serie de recomendaciones dirigidas tanto a pacientes como a familiares y amigos, con el fin de obtener el tipo de apoyo que necesitan:

  • Evite el secretismo familiar: Tal y como señala la Asociación, “la honestidad es la mejor política”. En algunas ocasiones, tratamos de proteger a nuestras familias y seres queridos ocultando las malas noticias. Sin embargo, ocultar la enfermedad de una persona al resto de la familia puede ser contraproducente. Comuníquelo directamente y mantenga un diálogo abierto con todos los miembros de la familia.

  • Incluya a sus hijos: A pesar de que su comprensión de la situación puede ser limitada, los más pequeños aprecian que se les informe acerca de lo que está ocurriendo en su entorno. A veces, ante la falta de información, los niños pueden desarrollar ideas erróneas, como por ejemplo, creer que ellos mismos son la causa de los problemas o los principales acontecimientos que suceden a su alrededor. Concretamente, pueden tener la falsa creencia de que hicieron algo que causó la enfermedad de uno de sus padres. Trate de evitar este tipo de situaciones hablando con ellos, a través de un diálogo abierto y honesto. Hágales ver que pueden hacer preguntas y anímeles a ello. Este tipo de actuación, puede ayudarles a aliviar su ansiedad. Recuerde, “un niño puede ser una fuente inagotable de risas y calidez para la persona enferma”.

  • Sea selectivo. No todo el mundo necesita saber acerca de su enfermedad o de la enfermedad de sus seres queridos. Seleccione cuidadosamente con quien comparte estas noticias. Tenga en cuenta que, en algunos casos, algunas relaciones pueden prosperar y otras volverse tensas. Por lo tanto, es fundamental que al compartir este tipo de información con otras personas, sienta que está siendo apoyado.

  • Sea claro con los amigos y la familia, explicándoles la manera en que pueden ayudarle. Las personas necesitan sentirse útiles, de modo que no debe avergonzarse a la hora de pedir favores, tales como ayudar en la cocina o con los niños.

A modo de conclusión, la APA manifiesta “si un ser querido tiene una enfermedad crónica, infórmese sobre esta enfermedad, ayúdele con los recados y tareas diarias, y ofrézcale apoyo emocional”.

Fuente: APA