Publicado: 28 de Septiembre de 2020

Ahora que has vuelto a la rutina y has dejado las vacaciones atrás, quizá sientas la necesitad de tomarte unas vacaciones de otro tipo: unas que te permitan desconectar de las relaciones más intensas o más conflictivas.


Descansar la mente y el corazón –después de un periodo que puede haber sido más intenso de lo habitual– es posible si te tomas lo que yo llamo unas "vacaciones emocionales".


No te sientas culpable si crees que necesitas unas vacaciones de este tipo: ¡es parte del trabajo emocional que estás haciendo para cuidarte a ti misma!


Además, desconectar emocionalmente durante un periodo de tiempo es una práctica muy sana.


Por qué tomar distancia de las relaciones intensas durante un tiempo


A continuación te enumeramos los principales beneficios este tipo de desconexión:


Te permite tomar distancia sobre los problemas y relativizarlos un poco para que no parezcan tan grandes.

Puedes pensar con más calma y adquirir otra perspectiva sobre un conflicto puede ayudarte a encontrar la solución.

Salir del mismo escenario puede servirte para cambiar los patrones y las dinámicas con las que te relacionas siempre.

Echar de menos a la gente que quieres es sano, y permitir que te echen de menos también.

Con la distancia podemos valorar más y podemos ser más valoradas por la gente que nos quiere.


Cuando tomas un descanso de emociones y sentimientos estás facilitando a tu mente y a tu cuerpo un tiempo de relajación que te servirá para aumentar tu bienestar, y disminuir el estrés.

Durante el período de vacaciones emocionales es posible que duermas mejor, te sientas con más energía y mejore tu estado de ánimo.

Al ralentizar tu sistema nervioso, bajarás la producción de cortisol y podrás aumentar la de oxitocina.

Puedes aprovechar para conectar contigo misma y para cuidarte mucho.

Puedes escucharte a ti misma y tener largas conversaciones sobre qué es lo que quieres, cómo quieres vivir la vida, con quién quieres compartirla.

Puedes hacer pequeños ritos de despedida para finalizar las relaciones que no te permiten ser tú, que no te dejan crecer, que no te aportan, que no te hacen feliz, o que te complican la vida demasiado.

Puedes ponerte de tu parte y establecer una alianza hermosa contigo misma para que tu relación contigo misma sea mejor.

Puedes hacer pactos contigo misma para cuidarte mejor.

Disfrutas de la tranquilidad, el silencio y la paz que necesitas para encontrar tu punto de equilibrio y para encontrar tu centro.

Con la mente y el corazón libres de intensidad emocional, lograrás concentrarte mejor y dispersarte menos, especialmente si necesitas energía para sacar adelante un proyecto personal o profesional.

Ganas mucho tiempo y energía cuando dejas a un lado las relaciones más intensas o las que más energía te exigen

Puedes idear estrategias para volver a tus frentes de batalla (o para cerrarlos si crees que te absorben demasiada energía).

Puedes analizar las luchas de poder que sostienes en todas tus relaciones.

Puedes hacer un repaso de tu historial amoroso y anotar las lecciones aprendidas.

Al dejar de sufrir, liberas espacio y tiempo para empezar a disfrutar.


Coral Herrera

Enlace: https://www.cuerpomente.com/blogs/coral-herrera/beneficios-de-tomarse-vacaciones-emocionales_7054

Imagen: Adobe Spark Post